La Wicca: filosofía y rituales
La religión Wicca está constituida por un conglomerado de religiones paganas con una tradición muy antigua que ha perdurado hasta la actualidad. Hoy exploraremos su filosofía y rituales más importantes, escogiendo los ritos más representativos de esta modalidad de “magia blanca”.
Para ello, recurriremos al manual de Raymond Buckland Wicca, prácticas y principios de la brujería ya que se trata de un miembro muy reconocido dentro de la comunidad wiccana.
Breve historia de la Wicca
La religión Wicca per sé surge en EE.UU a partir de la década de 1950 tras la abolición de las leyes contra la brujería. Se trata de una religión neopagana inaugurada por Geral Gardner, un escritor ocultista y antropólogo aficionado.
Gardner fue fiel defensor de una hipótesis pseudo-histórica que rastreaba la pervivencia actual de un culto de brujería semi-organizado y supuestamente milenario. Una de las mayores defensoras de esta hipótesis ha sido la doctora y antropóloga británica Margaret Murray, junto a la sufragista Matilda Joslyn Gage y el folclorista Charles Leland.
Sin poder afirmar la veracidad de dicha hipótesis, lo cierto es que el paleopaganismo, del cual la Wicca es deudora, proviene de la Edad de Piedra, y se asocia con genuinas formas de chamanismo desarrolladas durante los primeros siglos de la humanidad.
Por su parte, el paganismo como tal es un concepto desarrollado en el mundo cristiano para diferenciarlos seguidores del monoteísmo imperante de los adoradores de falsos dioses. Su etimología proviene del término «paganus» en latín, que significa habitante de un pagus, es decir, de una aldea.
Por tanto, la Wicca nace en el siglo XX como una religión aglutinadora, influida por la Orden del Templo Oriental de Alister Crowley, el neo-gnosticismo, la teosofía de Madame Blavatsky y la masonería moderna.
¿La Wicca es magia negra?
La wicca no es una religión que practique la magia negra. Pero, para hablar de magia negra, hay que entender primero qué es la magia en sí misma.
Uno de los componentes de la religión, aunque no es indispensable, es la magia. Las Ciencias de las Religiones entienden la magia como una serie de prácticas y ritos garantistas, esto es, unos ritos con una perfecta relación entre causa y efecto.
Si entendemos esta relación tal cual, a primera vista la magia no dista demasiado de la ciencia, ya que asegura el resultado favorable si el rito se practica correctamente. De ahí su habitual denominación de «ciencia oculta».
La magia tradicionalmente se divide en dos bandos: magia negra o magia blanca, indicando el componente moral y la intención que domina los rituales.
Por magia negra entendemos aquellos ritos destinados a causar el mal a algo o a alguien, a través de métodos destructivos. Aquí podría incluirse la magia roja (todos los rituales de amarre por “amor”) que obliga a la otra persona a enamorarse, violando el principio espiritual más importante: el libre albedrío.
Por magia blanca, por el contrario, entendemos los rituales destinados a la creación, el bien y la sanación de algo o alguien. También entrarían dentro de la magia blanca aquellos rituales destinados al ensalzamiento o culto de una divinidad positiva y la misma naturaleza.
Filosofía wiccana
La Wicca tiene un poso filosófico cargado de lirismo y romanticismo; ensalza el culto a la naturaleza y la vida, ciertas formas de feminismo, la ecología, la espiritualidad interior y las formas de curación alternativas.
Posee muchas ramas internas, siendo posible identificar en su filosofía rastros de la New Age, la Teosofía, distintas formas de paganismo, masonería, ocultismo, herbalismo e incluso hinduismo y budismo.
La Wicca puede practicarse tanto en solitario como en grupo; cuando se trata de una comunidad, la Wicca establece sistemas tanto matriarcales o patriarcales.
Su lema es el siguiente:
“An`t it harm none, do what thou wilt” (Haga su voluntad, pero no haga nada que le cause daño a otro ser) – Credo wiccano
¿La Wicca es satánica?
La Wicca no acoge en principio ninguna práctica mágica destructiva. Partiendo de este hecho, no debemos relacionarla con algo satánico (que no satanista) ya que no comparte los preceptos religiosos cristianos. Estos, por el contrario, sí que creen en Satán como una entidad antagónica al ser humano.
La Wicca entiende la figura del Demonio (Ha-Satán, Diábolo) como “el adversario” de la moral y cosmovisión del cristianismo. Entienden que el diablo no es más que, como dice su propia etimología, el oponente del dios cristiano.
Rituales y prácticas
Las prácticas Wicca troncales son los denominados Sabats, de los cuales diferenciamos los Sabats mayores y menores.
Los wiccanos también rinden culto a dos arquetipos religiosos masculino y femenino: el dios y la diosa. Se trata de dos arquetipos que se han ido observando históricamente bajo muchos nombres, como la Venus romana, diosa de la fertilidad, y el Cernunnos celta, el dios astado, dueño y señor de la naturaleza, por citar algunos.
Para la Wicca, la diosa está relacionada con la luna y la energía intrínsecamente femenina del solsticio de verano. Por su parte, el dios está relacionado con el sol y la energía intrínsecamente masculina del solsticio de invierno.
Respecto a los ritos, los sabats mayores son los cuatro festivales de la naturaleza estacional: Samhain, Beltane, Imbolc y Lughnasadh. Mientras que los sabats menores son los festivales específicamente dedicados a las fases de la luna y el sol.
Ritual del Samhain
La noche de Halloween proviene del sabat mayor del Samhain, de origen celta. El ritual wiccano del Shamaon, descrito por el propio Buckland, consiste, a grandes rasgos, en lo siguiente:
El Samhain es el momento del año para liberarse de las debilidades. Los asistentes del ritual se reúnen en círculo y escriben en un pergamino los malos hábitos de los cuales quieren deshacerse.
El borde del círculo se decora con frutos de temporada y hojas otoñales para incrementar la energía; se debe adecuar un altar con flores, velas y vestir con ropa anaranjada. En el altar se deposita un casco con cuernos. Los asistentes necesitan la compañía de un caldero.
Se realiza un rito a la Luna llena o nueva, en caso de que coincida y se hace sonar una campana tres veces para que la gente, encabezada por el sacerdote o sacerdotisa, se muevan en círculos en la dirección de las agujas del reloj. El baile se acompaña de música y se canta en honor de los dioses. Después, se lee la aprobación de un motivo estacional, incluyendo las creencias locales, por ejemplo, a través de una representación teatral.
El sacerdote o sacerdotisa se despiden de un año viejo y todos los asistentes saludan la llegada del año nuevo, despidiéndose de la Señora, la Diosa, y dando la bienvenida al Señor, que da paso al otoño y el solsticio de invierno.
El ritual se puede acompañar de ofrendas al altar, acompañado de una ceremonia donde se reparten tortas y cerveza, y se limpia el templo (la zona del ritual). Después se suele finalizar con juegos, entretenimiento y un gran festín nocturno.
Quiero ser wiccano/a
Hoy en día EE. UU es una de las grandes mecas de la Wicca. Se realizan numerosos festivales y seminarios esparcidos por los estados. Los adeptos aparecen en diferentes medios de comunicación y es una religión legalizada y reconocida.
En España existen varios canales para formar parte de una agrupación Wicca, por lo que os facilitamos los enlaces a continuación y el trabajo de final de grado de Cristian David Moar, quien ha investigado sobre la visibilidad de las religiones minoritarias en España, entre ellas, la Wicca:
https://wiccaceltibera.wordpress.com/about/
https://www.meetup.com/es-ES/topics/wiccan/
https://es.paganfederation.org/paganismo/wicca-y-brujeria/
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