Turquía, un país de contrastes II: Ankara
Siguiendo con el recorrido por Turquía, un país de contrastes, nos vamos a detener en Ankara (Angora) la capital de Turquía, en la región de Anatolia Central.
Allí nos centraremos en dos puntos: Antikabir, el mauseolo conmemorativo del estadista Kemal Atatürk, y el Museo de las Civilizaciones de Anatolia. Uno de los museos más importantes del mundo.
Pero antes, conozcamos un poco la historia de Ankara.
Historia de Ankara
Primera fase
Ankara es una importante ciudad establecida estratégicamente en las rutas que conectan Anatolia de norte a sur y de este a oeste.
Su entorno está lleno de asentamientos prehistóricos, como las cercanías del río Cubuk y la zona de Eti, Ergazi y Maltepe. Todos ellos puntos clave en el camino que lleva hasta Estambul.
El primer asentamiento importante de la ciudad se produjo durante la época de los frigios. Está localizado entre el Templo de Augusto y la Puerta de Cankiri, una mítica ciudad fundada por el rey Midas. Los frigios le dieron a este asentamiento el nombre de «Ancyra» del cual deriva el sustantivo .
Los frigios habitaron Ankara e inmediaciones desde el siglo VIII hasta el V a.C. Lamentablemente, el tiempo que transcurre entre la época frigia hasta el gobierno de Alejandro El Grande de Macedonia es aún desconocido.
Segunda fase
Se sabe que Alejandro permaneció en la Ancyra frigia a la espera de la llegada de las tropas del rey persa Darío I (522-486 a.C). Posteriormente, los tectósagos, una tribu de incursores Gálatas (celtas) habitaron en las inmediaciones de la meseta del Halys, Ankara y Pessinus. Convirtieron Ankara en su capital hasta que fueron derrocados por Manlius Vulso, un centurión romano (189 a.C).
Tras la soberanía romana, Ankara sobrevivió en el Imperio Bizantino hasta el siglo VII. Entonces, comenzó a sufrir saqueos y ataques perpetrados por las hordas árabes. En 1071, el ejército del sultán selyúcida Alp Arslán derrotó al ejército bizantino en Manziquert. Es cuando Ankara pasó a depender desde entonces de la administración Selyúcida.
Tercera fase
Como todas las ciudades selyúidas, el Imperio Mongol sacudió la ciudad y la sometió a su control desde el año 1304. Pese a ello, se permitió el desarrollo comercial bajo la presencia de gobernadores provinciales, los Ahi Beyleri.
Finalmente, bajo control otomano, Ankara se convirtió en el centro de la provincia de Anatolia, siendo gobernada por diversos sultanes hasta el siglo XVII. Entonces se tornó en el escenario de las sublevaciones, incendiando gran parte de la ciudad.
Con la caída del Imperio Otomano y la Guerra de la Independencia turca, la ciudad volvió a cobrar poco a poco su importancia. Pasó a ser la capital del nuevo estado de la República de Turquía en 1923.
Anitkabir, el mausoleo de Atatürk
Anitkabir significa literalmente «tumba conmemorativa» y es un mausoleo que homenajea a la figura de Mustafa Kemal Atatürk. Atatürk fue el líder de la Guerra de Independencia Turca y presidente fundacional de la República de Turquía.
Atatürk murió el 10 de noviembre de 1938 como un gran estadista y político que trajo la modernización que tanto ansiaba el país. La construcción del mausoleo representó la cristalización de la ideología nacional turca de revolución y modernización.
Se trata de un mausoleo monumental, abierto al público y reconvertido en un museo cuyas fechas de construcción se suceden en varias etapas.
El enclave del mausoleo no es un lugar insustancial, ya que se trata del «Parque de la paz» con una abundante vegetación alrededor. Todo el conjunto se inspira en el lema «Si hay paz en casa, hay paz en el mundo».
Al interior, es posible visitar un museo de arte con la colección privada de Ataturk, así como otro museo dedicado a la historia política y militar de este personaje. Para los más curiosos, dicho sea de paso, es imprescindible visitar la Torre de la Reforma, donde aparecen varios relieves del artista Nusret Suman. Dichos relieves plasman la decadencia del Imperio Otomano y del triunfo de las reformas de Atatürk.
Museo de las civilizaciones de Anatolia
Atatürk sugirió la idea de erigir un «museo hitita» en la capital, convirtiendo el Museo de las Civilizaciones de Anatolia en uno de los más importantes del mundo.
Allí se exhiben cronológicamente distintas piezas desde el Paleolítico hasta la actualidad. Cuenta con artefactos de la industria lítica, esculturas, cerámicas, estatuillas, objetos de culto, pinturas al fresco…
A continuación, reflejaremos las obras icónicas de cada período histórico. Para ello, utilizaremos como fuente la guía que nos proporcionaron en el propio museo.
Paleolítico (Edad de Piedra, 2 millones de años – 10.000 a.C)
En la época que denominamos Paleolítico o Edad de Piedra, el período del Paleolítico Superior es en el que más se desarrolla esta industria. Aparecen numerosos utensilios elaborados con un grado de complejidad notable, como raspadores, grabadores, perforadores, puntas de hoja y carretes de piedra.
Así mismo, el ser humano empieza a confeccionar obras de arte y a decorar el interior de sus casas con un cierto gusto estético y religioso. Destaca el yacimiento de la caverna de Karain, al noroeste de Antalya.
Neolítico (Edad de la Piedra Pulida, 10.000-3.000 a.C)
Durante el período Neolítico, la humanidad se convierte en una gran productora agrícola. Es cuando se empiezan a formar los primeros asentamientos sedentarios, destacando en el caso de Turquía el centro neolítico de Catalhöyük, al sureste de Konya.
Allí, las casas excavadas en los yacimientos presentan planta rectangular, alzado de adobe, una techumbre plana, un hogar, un depósito y una cocina. El interior se decora con un sofá fijo, una chimenea y un horno para los alimentos. Las casas están unidas por un sistema de patios.
En las paredes, destaca la decoración escultórica de cabezas de toro. Delimitan el espacio más sagrado de la vivienda y el objeto de culto más importante del momento.
Calcolítico (Edad del Cobre, entre el Neolítico y la Edad de Bronce)
También llamada «Edad del cobre» el calcolítico se caracteriza por la incorporación del uso del cobre junto a la piedra, como se ha podido comprobar en excavaciones como la de Hacilar, Canhasan o Kurucay.
La cultura de Hacilar destaca como una de las más desarrolladas del Calcolítico temprano en la península de Anatolia. Posee casas de planta rectangular o cuadrada sobre una base de piedra con pareces de arcilla y techumbre plana.
También se define por la aparición de objetos domésticos pintados a mano sirviéndose de una alfarería rica. Se recurre a la policromía y a los motivos geométricos.
Se hereda el trabajo de figurillas de diosas madre representadas en gran parte sedentes y con una postura esquemática.
Período del bronce antiguo (3000 a.C- 1200 a.C)
Anatolia entra en la edad del bronce hacia finales del IV milenio y comienzos del III a.C. Los nativos de la región empezaron a mezclar el cobre con el estaño para obtener la aleación que da nombre a esta época, capaces de elaborar joyería, recipientes y fabricación de armas.
Las ciudades, ahora amuralladas, conservaban las unidades domésticas unidas entre sí, destacando las casas «megarón» de Beycesultan.
La existencia del comercio propició la propagación de piezas por distintas regiones. Con ello la metalurgia se perfecciona y surgen métodos como el colado, el molde y la batidora. Las ofrendas fúnebres y los recipientes para colar metales son ahora un rico testimonio del avance tecnológico del momento.
Colonias comerciales asirias (1950-1750 a.C)
El inicio de este período coincide con la historia escrita de Anatolia. Hablamos del 1960 a.C, cuando el estado asirio de Mesopotamia del norte había establecido un sistema comercial muy efectivo en Anatolia.
Los comerciantes asirios viajaban a la región para comerciar con estaño, pieles de cabra, telas, tejidos y artículos de perfumería y joyería. Se mantenían a las afueras de la ciudad amurallada, en barrios conocidos como «Karum» (mercado) de los cuales el más importante era Kanis.
Fruto del comercio, aparecieron tablillas rectangulares redactadas en asirio, con escritura cuneiforme directamente sobre la arcilla. También hay sellos cilíndricos con relieves de imágenes relativas al intercambio comercial. Es un momento en el que también se difunde el torno de alfarero y hacen su acto de presencia los hititas.
Era hitita (1750-1200 a.C)
Hacia el final del período de las colonias comerciales asirias, el rey Anitta trató de unificar las ciudades estado de Anatolia bajo la fundación de un gran estado centralizado.
Cuando parten los últimos comerciantes asirios de Anatolia, el rey hitita Hattusili I traslada la capital de Nesha (Kanis) a Hattusas (Bogazköy) en el período que llamamos «Imperio hitita antiguo». En esta época, se mantiene gran parte de la tradición artística anatoliana. Ejemplos: vasijas ceremoniales y estatuillas de toro en Bogazköy, Alacahöyük, Eskiyapar, Inandik y Masathöyük.
Sin embargo, bajo la época del imperio, el arte alcanza sus mayores cotas en cuanto a técnica y estética. Las obras más destacables provienen de los emplazamientos anteriormente citados, tratando temas como la religión (orthostates) y el poder.
El mejor ejemplo de ello son las estatuillas de oro, marfil, bronce y piedra que representan a los dioses hititas de enormes ojos almendrados, narices aguileñas y labios sonrientes. Tienen la particular característica de representar la cabeza y los pies de perfil y el cuerpo de frente (muy al estilo egipcio).
En cuanto a las vasijas, existe un cierto retraso frente a avances anteriores, prestando solo atención a aquellas piezas con un uso ritual.
Período hitita tardío (1200-700 a.C)
Las invasiones del Egeo terminaron con el Imperio Hitita en torno al 1200 a.C
Las ciudades hititas, especialmente la capital Bogazköy, fueron incendiadas y saqueadas. Los hititas, refugiados en las zonas más meridionales y orientales fundaron sus últimos principados.
Destacan las excavaciones de Zincirli, Malatya-Aslantepe, Karatepe y Tell Tayinat de ciudades amurralladas que conservaron en su interior edificios religiosos y administrativos. El arte estuvo influenciado, por su posición geográfica, de elementos hititas, asirios del período tardío, arte arameo y de la cultura Hurriti Mitanni (hurritas).
Los frigios (900-330 a.C)
Los frigios llegaron a Anatolia a comienzos del siglo XII a.C.
Destruyeron casi todas las grandes ciudades y derrumbaron el Imperio Hitita, estableciendo en Sakarya el centro administrativo en la ciudad de Gordión.
Los frigios hablaban en lengua indoeuropea, y el historiador Heródoto los cita como provenientes de la actual Macedonia. Su reino fue muy poderoso hasta la dominación lidia, perdiendo su independencia causa del sitio persa en el 550 a.C.
En cuanto a su arte, destacan los túmulos mortuorios y el estilo único desarrollado en torno a las calderas. Estas eran adornadas con cabezas humanas al estilo asirio y con imágenes zoomorfas de toros y leones. También son significativas las estatuas de la diosa Cibeles, su diosa principal (de la fertilidad y la abundancia) también conocida como la diosa «Kubaba».
El culto a Cibeles se difundió rápidamente, pasando primero al mundo religioso helenístico y después romano a través de Sardes.
Los urartos (I milenio a.C)
Cerca del lago Van, los urartos fundaron un estado durante el I milenio a.C.
Su territorio se expandía desde el lago de Urumiye hasta el valle de Éufrates, y en el sur, desde el Cáucaso al valle de Aras mientras que en el litoral oriental, desde el Mar Negro hasta Damasco y el Mediterráneo. Rodeados de dificultades naturales como cadenas montañosas y valles estrechos, los urartos fueron excelentes agricultores y ganaderos.
Aunque sus tablillas cuneiformes son escasas, realizaron enormes inscripciones en piedra conmemorando victorias militares e hicieron uso de jeroglíficos similares a los hititas.
Destacan las pinturas murales (imágenes vegetales y geométricas) fortificaciones y obras militares (yelmos, escudos, cinturones, aljabas…) nichos mortuorios excavadas en la roca, sarcófagos de madera y piedra de influencia asiria…
También los temas del árbol de la vida, esfinges aladas, dioses y animales sagrados, zoomaquias (luchas animales) y escenas inspiradas en la naturaleza.
El período de Lidia (VII-VI a.C)
Esta época se extiende hasta la era del bronce con relaciones sostenidas por el Imperio Hitita.
Su época de más desarrollo fue durante la dinastía Mermnad hasta la época de Creso (685-547 a.C) y especialmente después de la muerte del mítico Rey Midas (695 a.C) cuando formaron un poderoso reino.
En cuanto al arte, el arte Lidio es un continuador del precedente anatoliano, diseminando sus artistas por Persia, Pasargade y Susa. Se recurre a la joyería, imitando la de los palacios griegos, el trabajo del marfil y la fabricación de estelas de voto. De la escultura destacan las imágenes de esfinges de las tumbas y túmulos (psicopompos) de Harra-Manisa-Kirkagac y los frescos de las tumbas de Usak-Aktepe.
Por otro lado, las obras que se exhiben bajo el nombre de «Los Tesoros de Lidia» están formadas por objetos como vasijas, estatuillas, joyas, sellos, frescos murales y esfinges de mármol. La mayor parte se exponen en el museo de Usak, pero el de Ankara cuenta con algunos ejemplares.
Hacia Grecia y Roma (Finales de la Edad de Bronce >)
Cuando las gentes provenientes de Grecia se adentraron en la Anatolia occidental y se mezclaron con la población nativa, empezaron a sentarse las bases de la civilización jónica. Estamos hablando de la época final de la Edad de Bronce.
Estamos hablando de la primera mitad del I milenio a.C, durante el período protgeométrico (1100-950 a.C) al cual le sucederá el Período Geométrico (950-600 a.C) con el Período Orientalizante de Grecia oriental, el Período Arcaico (776-499 a.C) y las conquistas de Alejandro El Grande de Macedonia en el siglo IV a.C.
A la muerte de Alejandro El Grande, el reino se divide y Anatolia queda controlada bajo el reino de Pérgamo, convirtiéndose posteriormente en un territorio anexionado más del Imperio Romano.
Para conocer algunas de las obras de arte de época griega y romana que custodia el Museo de las Civilizaciones de Anatolia pincha aquí.
-1 Comentario-
me encantó 😀 que ganas de visitar este lugar!!